CAPÍTULO 6 -
Los estratos han sido formados rápidamente
Un axioma de la datación geológica es que los estratos se formaron
lentamente durante cientos de millones de años. Se supone que se acumularon uno
encima del otro de modo que el más bajo de estos estratos puede ser decenas o
hasta cientos de millones de años mayor que la capa superficial más reciente.
Se piensa que esta columna puede describir el orden en que los estratos
aparecieron en el suelo.
Sin embargo, hay muchos puntos
en contra de períodos tan largos. Ya se ha mencionado que la aparición de
radiocarbono en fósiles del período cámbrico y en otros estratos antiguos
apunta a períodos de miles, no millones de años. El radiocarbono no existiría
si los fósiles y los estratos tuvieran cientos de millones de años de edad.
A continuación vamos a
considerar otra evidencia que contradice la noción de que los estratos han sido
formados durante un período de millones de años. La evidencia se basa en lo
siguiente:
- Fósiles de troncos largos en los estratos
- Fósiles en los estratos
- Ausencia de erosión
- Rápida creación de los estratos en el Santa Helena durante nuestro
tiempo
Los fósiles de troncos largos en los estratos contradicen la noción de que los estratos fueron formados lentamente
durante un período de millones de años. Fósiles de troncos de árboles
extendiéndose a través de varios estratos han sido encontrados en distintas
partes del mundo. Una vieja fotografía tomada en una mina de carbón de
Saint-Étienne (en Francia) demuestra cómo cada uno de cinco troncos fosilizados
separados atraviesa aproximadamente diez estratos o incluso más. Según esta
perspectiva evolutiva, los estratos deberían tener millones de años de
antigüedad; sin embargo, todos los troncos se extienden a través de ellos.
¿Tienen los troncos millones
de años o los estratos se formaron rápidamente? Ninguna de estas afirmaciones
puede ser cierta. La última alternativa es ciertamente más probable, ya que los
fósiles de los troncos no pueden ser creados de otra manera más que quemándose
rápidamente:
Muchas señales se refieren a varios estratos
superpuestos formados como consecuencia de un proceso mundial y continuo, ya
que los fósiles de muchas plantas y grandes animales en posición derecha
penetran varios estratos sin dejar rastros de ser expuestos a la erosión
durante miles de años en ninguno de sus extremos. Por lo tanto, un tronco
permanece en posición derecha en medio de capas de sedimento rápidamente
acumulativas. Dinosaurios enormes también han sido encontrados en posiciones
semejantes. Un tronco de árbol de 24 metros de altura que atraviesa más de diez
estratos fue encontrado cerca de Edimburgo, y todo indica que el tronco había
sido rápidamente transportado al lugar. Tampoco han sido encontradas señales
que indiquen erosión entre los varios períodos geológicos en los distintos
estratos. (30)
Troncos gruesos que han permanecido en una posición
derecha atraviesan docenas de metros de suelo indicando cuán rápidamente ha
sucedido todo. Los estratos no pueden ser el resultado de una lenta formación
de la turba, como afirman los partidarios de la evolución. (31)
Fósiles en los estratos. Una
de las evidencias más garrafales de la rápida estratificación de los estratos
son los fósiles contenidos en las capas del suelo. Los fósiles dentro de los
estratos sólo pudieron haber sido creados por deslizamientos de barro que
entierran un animal o una planta muy rápidamente. Esto es válido también para
los fósiles principales y los fósiles de troncos mencionados anteriormente.
En
realidad, siempre que encontramos fósiles, éstos indican que la planta o el
animal ha sido enterrado rápidamente bajo la tierra, y luego transformado en
fósil. (El proceso de fosilización no
tiene que tomar tanto tiempo: árboles fosilizados han sido preparados en unos
pocos días bajo condiciones de laboratorio.) Si la planta o el animal no
hubieran sido enterrados rápidamente, se habrían podrido o habrían sido comidos
por otros animales.
Así, los fósiles encontrados
hoy en día sólo indican que el estrato donde se encontraron debió haber surgido
en un corto período de tiempo o en un par de días o semanas, y no en un período
de millones de años. Fueron rápidamente enterrados en el suelo, ya que de lo
contrario no podrían haberse convertido en fósiles. Millones de años no
evitarían el proceso de nacimiento. Muchos investigadores también admiten que
varios estratos y fósiles sólo pueden ser creados debido a catástrofes
naturales. No pueden haber sido formadas de otra manera. La mejor forma de
explicar los estratos de lodo que han enterrado plantas y animales es con el
relato del diluvio mencionado en la Biblia.
Los siguientes comentarios
también hacen referencia a la rápida estratificación que permitió la creación
de los fósiles. Enseñan que los estratos nacieron como consecuencia de largos y
lentos procesos:
Animales vertebrados tales como peces, reptiles, etc.
se descomponen cuando sus partes blandas son removidas. Deben ser enterrados
rápidamente después de su muerte para evitar la putrefacción y ser comidos por
otros animales. (James Dana, Manual of
Geology, pág. 141)
Es evidente que si la formación de los estratos
tuviera lugar a un ritmo tan desacelerado, los fósiles no podrían ser
preservados, ya que no serían enterrados bajo el suelo antes de ser
descompuestos por ácidos acuosos, o antes de ser destruidos y rotos en pedazos
por ser frotados y golpeados contra el fondo de un mar poco profundo. Pueden
estar cubiertos de sedimento sólo por accidente si son enterrados rápidamente. (Geochronology or the Age of the Earth on the Basis of Sediments and
Life", Bulletin of the National Recearch Council No. 80, Washington D. C.,
1931, pág.
14)
Ausencia de erosión. Si
los estratos hubieran surgido lentamente en un período de millones de años,
deberíamos ver claras señales de la erosión entre los estratos. Sin embargo,
como los distintos estratos han sido examinados globalmente, ha sido imposible
encontrar señales entre los estratos – no han sido encontradas incluso en el
famoso Gran Cañón. Al contrario, es más probable que los estratos estén
uniformemente conectados unos a otros y que hayan sido formados continuamente
uno encima del otro:
Además, no se han encontrado señales de erosión
mundial entre los distintos períodos, sino sólo estratificación mundial de
tipos de roca. Entonces, parece que la estratificación de los estratos ha sido
un proceso continuo, casi incesante.
El hecho de
que no se encuentren señales mundiales del desgaste entre los estratos y vean
los efectos consumidores de las fuerzas de la naturaleza en el suelo en
distintas eras, es muy significativo. Esto indica que ha habido una ausencia de
erosión en el suelo durante “millones” de años. La única explicación para este
fenómeno, observada en la naturaleza, es la rápida estratificación de los
estratos uno encima del otro. (32)
La falta de erosión entre los estratos sugiere tres puntos:
1. Los estratos no han tardado millones de años en ser formados; más
bien fueron formados en un tiempo corto, quizás en un par de días o semanas.
2. Los estratos más elevados tienen casi la misma edad que los estratos
más bajos, lo que sugiere que se han acumulado rápidamente sobre los estratos
más bajos. Los fósiles de troncos previamente mencionados son un claro ejemplo
de esto, ya que penetran más de diez estratos. La diferencia entre el estrato
más alto y más bajo no es necesariamente más que unas pocas horas o días.
3. El surgimiento de los estratos vigorosamente sugiere un modelo
catastrófico: estratos de una inundación apilados uno encima del otro. Incluso
los geólogos admiten que los estratos son principalmente formados por agua e
inundaciones, ¿así que cuál podría ser una mejor alternativa que una inundación
mundial que moviera los estratos uno encima del otro durante un período de
tiempo muy corto? En la historia bíblica del diluvio, las aguas inundaron la
Tierra por 150 días.
La siguiente cita tomada de un
libro de texto escolar de biología (Koulun
biología, lukiokurssi 2-3, 1987, Tast – Tyrväinen – Mattila – Nyberg, págs.
176-7) hace referencia al mismo problema. El texto se refiere a la creación del
carbón natural que se supone ocurrió en el período carbonífero, cuando los
bosques se hundieron en capas de agua y barro. Sin embargo, una explicación más
probable es la del diluvio, durante la cual sucedieron exactamente los mismos
eventos. El diluvio también explicaría la existencia de fósiles, ya que éstos
pueden ser creados sólo siendo rápidamente enterrados:
Los depósitos de carbón más
significativos de la Tierra fueron creados hace aproximadamente 300 millones de
años. Este tiempo se llama el período carbonífero. Durante este período, el
clima era cálido y húmedo. La vegetación era más exuberante que nunca en la
historia, al menos en las áreas pantanosas más bajas. Se cree que la atmósfera
contenía más dióxido de carbono que en estos días. Helechos con forma de árbol,
colas de caballo y licopodios se convirtieron en bosques. El carbón mineral fue
creado cuando estos bosques –como el clima se volvía más cálido y las capas de
hielo se derretían– fueron enterrados por agua y cieno.
El monte Santa Helena, nuevos estratos y cañones. Se ha mostrado que los estratos pueden crearse rápidamente. Al momento de
la erupción volcánica del Monte Santa Helena en 1980, una serie de estratos
superpuestos fue formada. Estos estratos tenían cien metros de grosor como
mucho y fueron creados en un período de apenas un par de semanas. Millones de
años no fueron necesarios: distintos tipos de estratos se acumularon uno encima
del otro en unos pocos días.
Cerca de dos años más tarde,
después de que algunos corrimientos de tierra hubieran cobrado sus víctimas, se
formaron cañones en la misma área y el agua pronto comenzó a fluir hacia los
cañones. Estos cañones no se formaron gradualmente en un período de millones de
años como resultado del flujo de agua –como se ha explicado el nacimiento del
Gran Cañón – sino que fueron formados rápidamente, y el agua comenzó a fluir en
ellos poco tiempo después. Es probable que otros grandes cañones hayan nacido
de la misma manera. Miremos la siguiente cita que describe bien el problema. En
primer lugar, el texto describe cómo una serie de estratos superpuestos fue
formada en el área del monte Santa Helena. También describe cómo un cañón se
formó más tarde en la misma área y el agua comenzó a fluir en este cañón. El
proceso no llevó millones de años, como los evolucionistas habrían esperado.
Todo esto tuvo lugar durante un corto período de tiempo:
En algunos lugares, la tierra estaba cubierta por una
superficie de múltiples capas que tenía casi 200 metros de grosor. Más de un
millón de troncos de árboles, sin ramas ni corteza, yacían en vastas áreas y
metros y cubrían la superficie de un lago que una vez fuera muy hermoso. Toda
la vegetación había desaparecido. La vista era como la de un planeta muerto.
(…)
Esto es
evidencia real de cómo los estratos pueden surgir en unos pocos instantes. Pero
más evidencia dada por la naturaleza aparecería. Menos de dos años después de
la explosión, en marzo de 1982, los estratos superficiales que se habían
formado comenzaron a moverse nuevamente. El corrimiento de barro destruyó todo
lo que había en su camino. Los árboles se encontraron en el deslizamiento con
sus raíces apuntando hacia arriba. Las casas y los puentes no fueron un
problema para el corrimiento. Nuevos estratos fueron creados, pero esta vez
estaban más abajo que el área de destrucción anterior. Sin embargo, lo que más
interesaba a los investigadores eran los restos en el área de destrucción
previa. Sólo una parte de las capas había comenzado a moverse. Ahora había
grandes cañones cuyas paredes estaban en lugares de más de 50 metros de altura.
En las fotografías, esta área se veía exactamente como el Gran Cañón del
Colorado.
Los
investigadores, quienes por décadas habían estudiado el surgimiento del Gran
Cañón y la composición de sus estratos, estaban extremadamente agradecidos. Las
fuerzas naturales habían apoyado sus teorías catastróficas de manera
sorprendente. (…)
Los
estratos del cañón se formaron sin interrupción por el poderoso movimiento del
agua y las erupciones volcánicas. Los estratos habían sido simultáneamente
ablandados y cubiertos por agua. Cuando el agua se hubo drenado, durante los
años siguientes, varios hundimientos tuvieron lugar en la región – cuantiosos
flujos de barro que, como los corrimientos de tierra, formaron grandes áreas
cañoneras. Sólo quedaron los estratos que habían solidificado lo suficiente. En
el caso del Santa Helena, esta teoría fue apoyada con evidencia real. En un par
de años, más de cien metros de estratos que fueron formados en la erupción
endurecieron y comenzaron a transformarse en piedra. Algunos de los estratos
contenían materiales cuyo endurecimiento parecía el del concreto. Sobre la base
del cañón se formaron pequeños arroyos, y luego se convirtieron en ríos. La
imagen era ahora incluso más completa: los cursos de agua no formaban cañones.
En lugar de eso, las bases de los cañones bien servían de cauces para las
corrientes. La teoría del surgimiento de los cañones durante millones de años
creada por Darwin demostró ser incorrecta por la misma naturaleza. (33)
Jari Iivanainen
